Mientras Estados Unidos y China firman una incómoda tregua de un año, la conclusión para los inversores es que cada país duplicará su apuesta por la tecnología local, dijeron los analistas. “Poseer exportadores de calidad y acciones tecnológicas ricas en I+D alineadas con la localización, y utilizar probabilidades de escenarios -no titulares- para evaluar el riesgo”, recomendaron estrategas de Morgan Stanley en un informe de este mes sobre cómo navegar el nuevo “régimen de control de exportaciones”. “La rivalidad estratégica sigue sin resolverse, con la tecnología, las cadenas de suministro críticas y los mercados de capital en el centro de las tensiones actuales”, dice el informe. Si bien Washington ha restringido el acceso de China a la tecnología avanzada y ha alentado la inversión relacionada con la inteligencia artificial en Estados Unidos, China está aumentando su propio gasto y asignación de recursos a la tecnología avanzada en su próximo plan quinquenal. Potencia semi informática El núcleo de la carrera de la IA es la potencia informática, concretamente en los semiconductores. La principal elección de Morgan Stanley es SMIC, el gigante nacional de chips de China. Los analistas califican las acciones que cotizan en Hong Kong como sobreponderadas y tienen un precio objetivo de 80 dólares de Hong Kong (10,28 dólares). Eso es más del 16% por encima de donde cerraron las acciones el viernes. “Dados los controles de exportación de Estados Unidos y la expansión de la capacidad, esperamos que SMIC reciba más pedidos para la fabricación de nodos avanzados”, dijeron los analistas. “También creemos que la expansión de la capacidad de los nodos avanzados de SMIC respaldará el semidesarrollo de la IA en China”. Otra preocupación creciente es si las empresas tendrán suficiente energía para impulsar la IA. Los analistas de Goldman Sachs predijeron este mes que para 2030, China tendrá capacidad de energía excedente más de tres veces la que el mundo probablemente necesitará para alimentar los centros de datos. Para el próximo año, HSBC a fines de la semana pasada calificó la autosuficiencia energética como uno de los nuevos temas que impulsarán las acciones regionales. “Creemos que la historia de las acciones asiáticas en 2026 estará liderada por un alejamiento de las saturadas operaciones de IA”, dijeron sus analistas. La principal elección del banco fue Harbin Electric, de pequeña capitalización que cotiza en Hong Kong, que tenía más del 60% de ventaja sobre el precio objetivo de 22 HKD de HSBC, según el cierre del viernes. “Harbin Electric controla entre un tercio y la mitad de la cuota de mercado nacional en equipos de energía para carbón, energía nuclear e hidroeléctrica, y estos sectores contribuirán con casi el 70% de sus ingresos (en 2024)”, dijeron los analistas de HSBC. “Harbin es un modelo de negocio con pocos activos y recibe pagos anticipados de los clientes”. Hardware de robot En términos de comercialización de IA, las empresas chinas están compitiendo con sus pares estadounidenses no sólo por avances de software sino también por aplicaciones de hardware, particularmente en robots humanoides. Los analistas de Goldman Sachs visitaron nueve empresas de cadenas de suministro de robots humanoides a principios de este mes y descubrieron que la mayoría están “planificando activamente capacidad tanto en China como en el extranjero (principalmente en Tailandia, y menos en México)” para respaldar una posible producción en masa, por una suma de 100.000 a 1 millón de unidades al año. Si bien eso puede ser demasiado optimista en comparación con las proyecciones de Goldman de 1,38 millones de envíos anuales de humanoides para 2035, los analistas dijeron que los proveedores se están moviendo agresivamente y han mencionado que entre sus clientes se incluyen los conocidos jugadores humanoides Tesla Optimus, Agibot y Xpeng. La única apuesta de Goldman con calificación de compra en Hong Kong es Sanhua, que según la gerencia está adoptando un enfoque más conservador al aumentar la producción en función de los pedidos reales de los clientes. Sanhua también ha reservado capacidad en Tailandia para la producción de piezas de robots humanoides. A pesar del entusiasmo por la innovación tecnológica a largo plazo, en el corto plazo los mercados seguirán centrados en las últimas conversaciones comerciales entre Estados Unidos y China. Las dos partes aún tienen que llegar a un acuerdo firme sobre las exportaciones de tierras raras, aunque el Secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, ha indicado que se podría lograrlo antes del Día de Acción de Gracias. Todo esto significa que es probable que las acciones chinas sigan siendo muy volátiles. “Consideramos que esta tregua es frágil, dada la persistente confrontación competitiva entre Estados Unidos y China en múltiples frentes”, dijeron los analistas de Morgan Stanley, “lo que significa que las negociaciones continuas, las treguas y los estallidos periódicos probablemente serán la nueva norma en el futuro previsible”. Morgan Stanley dijo que el índice MSCI China tiende a sufrir correcciones a corto plazo tras períodos de tensión entre Estados Unidos y China. Pero descubrieron que “los nombres de hardware tecnológico y semiconductores a menudo se recuperan un mes después de sus fuertes caídas iniciales”. —Michael Bloom de CNBC contribuyó a este informe.











