
El presidente Trump dijo el lunes que impondría un arancel del 25 por ciento a los camiones medianos y pesados que ingresen a Estados Unidos a partir del 1 de noviembre.
El anuncio, que Trump hizo en Truth Social, retrasa y amplía un arancel que anunció a finales de septiembre.
Trump publicó en Truth Social el 25 de septiembre que los “camiones pesados (¡grandes!)” fabricados fuera de Estados Unidos estarían sujetos a un arancel del 25 por ciento a partir del 1 de octubre. Pero esos aranceles nunca se impusieron formalmente.
Trump ha planteado los aranceles como una forma de proteger la industria del transporte por carretera, que es fundamental para transportar mercancías por Estados Unidos.
El presidente anunció previamente aranceles a las importaciones de automóviles, acero y aluminio, cobre, muebles y otros bienes. También ha anunciado elevados aranceles sobre los productos farmacéuticos importados, sólo para que la Casa Blanca diga que están siendo retrasado en medio de negociaciones con los fabricantes de medicamentos.
Además, Trump ha impuesto amplios aranceles a las importaciones procedentes de decenas de otros países. Esas tarifas son objeto de un recurso judicial ante el Tribunal Supremo está listo para revisar.
Si bien Trump ha argumentado que los aranceles tienen como objetivo devolver la fabricación a Estados Unidos, los expertos han advertido que los aranceles conducirán a aumentos de precios que se trasladarán a los consumidores.











