Las vacaciones pueden ponerlo en contacto cara a cara con sus padres ancianos y otros seres queridos. Tal vez haya querido hablar con ellos para planificar el futuro. Dudas porque son tercos y resistentes a todo el tema. Lo has pospuesto. Ahora puede que tenga una oportunidad. Quizás sus padres ancianos sean tremendamente independientes, se resistan a recibir ayuda o desprecien abiertamente las preocupaciones de sus hijos.
A continuación se ofrecen algunas ideas sobre cómo abordar esas conversaciones difíciles pero necesarias con un padre testarudo que se niega a planificar el futuro.
Conversación cuando tu padre anciano está relajado
1. Elija el momento y el lugar adecuados
Elige un momento en el que tanto tú como tus padres estén tranquilo y relajado. Elija un entorno privado y tranquilo donde no lo interrumpan. En medio de una reunión familiar no es el momento adecuado. El objetivo es crear un entorno en el que tus padres se sientan cómodos y no presionados.
Consejo: Al principio, aborda estas discusiones de manera casual. Podrías empezar diciendo: “He estado pensando en cómo podemos hacer las cosas más fáciles a medida que envejeces. ¿Podemos hablar de eso? Enmarque la conversación como un esfuerzo de colaboración en lugar de una crítica de su situación actual.
2. Sea respetuoso y empático
Los padres ancianos a menudo temen perder el control de sus vidas, y este miedo puede ponerlos a la defensiva o volverlos tercos. Reconocer sus sentimientos es útil. Por ejemplo:
- “Sé que siempre has manejado todo tú mismo y has hecho un gran trabajo. Pero me sentiría mejor sabiendo que contamos con un plan para cualquier imprevisto, como una caída o un problema de salud”.
Evite el uso de lenguaje que pueda parecer condescendiente o crítico. Es probable que declaraciones como “Ya no eres capaz” o “Necesitas ayuda” cierren la conversación incluso antes de que comience.
Consejo: La escucha activa ayuda mucho. Eso requiere hacer preguntas de una manera no amenazante y mantener la boca cerrada mientras responden. El silencio por un tiempo está bien. Evite interrumpir. Reconozca su perspectiva.
3. Sea persistente, pero paciente
No es raro que los padres mayores se resistan por completo a estas discusiones, ignorando sus preocupaciones diciendo: “Estoy bien” o “Lo solucionaremos más tarde”. Esta resistencia puede resultar frustrante, pero es importante no darse por vencido.
Revise el tema con el tiempo. Comparta ejemplos de la vida real de por qué la planificación es esencial. Por ejemplo, podría mencionar a un amigo o vecino que enfrentó dificultades innecesarias porque sufrió un derrame cerebral y no tenía una directiva de atención médica. Las historias pueden hacer que la importancia de la planificación sea más identificable y menos abstracta.
Consejo: Si tus padres se cierran, dales espacio. Vuelva al tema más tarde, tal vez planteándolo de una manera diferente. La persistencia no significa presionar; significa mantenerse comprometido a mantener la conversación, incluso si lleva tiempo.
4. Céntrese en su seguridad
Muchos padres ancianos se resisten a conversar sobre planificación porque sienten que amenaza su independencia. En secreto pueden temer que los pongas “en una casa” es decir, un lugar de pesadilla que ven como una especie de prisión. Reformule la discusión para enfatizar cómo la planificación anticipada puede proteger su autonomía. Por ejemplo:
- “Tener un plan para su atención significa que siempre tendrá voz y voto en lo que sucede, incluso si surge algo inesperado”.
5. Traiga a un tercero neutral
A veces, un perspectiva exterior puede hacer toda la diferencia. Si sus padres se resisten, considere involucrar a un profesional, como un abogado especializado en derecho de personas mayores, un planificador financiero o un administrador de atención geriátrica. Estos expertos pueden apoyarlo y ayudarlo a explicar la importancia de planificar de una manera que su ser querido anciano sienta menos personal y más objetivo. Si su padre anciano se niega, puede consultar con un profesional para que le ayude a diseñar estrategias para encontrar más soluciones.
Consejo: Presente esta opción como un recurso para ellos, no para usted. Por ejemplo: “Encontré a alguien que se especializa en ayudar a personas con preguntas como la tuya. ¿Estaría dispuesto a hablar con ellos para obtener más información?
Conclusiones para tener conversaciones difíciles
- El tiempo importa: Elija un entorno tranquilo y privado para abordar temas delicados, evitando momentos de mucho estrés. Después de una comida puede estar bien.
- Respeto y Empatía: Reconocer sus miedos y escuchar sus preocupaciones sin juzgar. Habla menos y escucha más.
- La paciencia es esencial: Sea persistente, pero no presione demasiado de una vez. Bríndeles espacio para abordar sus temores de perder la independencia.
- Enmarque la conversación en torno a la seguridad Enfatice cómo la planificación protege su autonomía y puede ayudar a prevenir lesiones como una caída o un problema de salud repentino como un derrame cerebral.
- Busque apoyo profesional: Los terceros neutrales pueden proporcionar orientación valiosa y ayudar a superar la resistencia. Úselo para usted y como consejo estratégico, incluso si su padre anciano se niega a hablar con un extraño.
Pensamientos finales
Hablar con padres ancianos y testarudos sobre cómo planificar su seguridad y su futuro nunca es fácil, pero es una de las cosas más importantes que puede hacer como niño responsable. Si toma la iniciativa en esto, podrá ayudar a prevenir estrés innecesario para toda la familia.