
Los trabajadores sindicalizados de las tiendas de comestibles se manifiestan para oponerse a la fusión propuesta entre Kroger y Albertsons frente a un supermercado Ralph’s en Los Ángeles en 2023. El miércoles, Albertsons dijo que renunciaría al acuerdo después de que dos tribunales lo bloquearan.
Frederic J. Brown/AFP vía Getty Images
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Albertsons ha demandado a Kroger, iniciando un nuevo capítulo en la guerra de los supermercados después de que las dos cadenas de supermercados más grandes de Estados Unidos no lograron convencer a múltiples tribunales de que se les debería permitir fusionarse para enfrentarse a rivales más grandes como Walmart.
El martes, tanto un tribunal de distrito federal en Oregón como un tribunal estatal en Washington bloqueó el acuerdo de 24.600 millones de dólaresdiciendo que reduciría la competencia, lo que perjudicaría a los compradores.
El miércoles por la mañana, Albertsons abandonó la fusión y presentó una demanda contra Krogeralegando un incumplimiento intencional de contrato por no hacer lo suficiente para obtener la aprobación regulatoria para la fusión. Kroger, en una declaración en respuesta, dijo que Albertsons está desviando su propia responsabilidad.
Es probable que ambos se encaminen a una nueva y amarga lucha legal con dinero en juego. Albertsons busca “miles de millones de dólares” en daños y perjuicios por la pérdida de valor para los accionistas, costos legales y tiempo en el limbo. También quiere la tarifa de disolución de la fusión de 600 millones de dólares, a la que Kroger dice que Albertsons “no tiene derecho”.
Kroger dirige muchas tiendas de comestibles conocidas, incluidas Ralphs, Harris Teeter, Fred Meyer y King Soopers. Albertsons es propietario de Safeway y Vons y es probable que comience a buscar un nuevo comprador.
El litigio dejó pendiente la fusión Kroger-Albertsons por más de dos años. Un tercer caso, por el fiscal general de coloradopermaneció indeciso antes de que la fusión fracasara.
Las empresas argumentaron que sus principales competidores no eran los supermercados convencionales sino gigantes de alimentos como Walmart, Costco, Amazon e incluso las tiendas de un dólar. El dúo argumentó que sólo juntos podrían sobrevivir contra estos gigantes y que, combinados, tendrían más poder para negociar precios más bajos para los compradores.
La Comisión Federal de Comercio, que presentó el caso federal, argumentó que la compra de Albertsons por parte de Kroger daría lugar a menos opciones y precios más altos para los compradores.
Las demandas describieron a las dos compañías como los mayores rivales de la otra en muchos mercados, controlando mutuamente los precios, los horarios de las tiendas y la calidad de los productos.
El caso de la FTC prevaleció en el Tribunal de Distrito de Estados Unidos, lo que supuso una gran victoria para la administración saliente de Biden y para la jefa de la FTC, Lina Khan, quien hizo del escrutinio más estricto de las fusiones un pilar central de su legado.