
Durante la última década, la historia del corte del cable fue simple: la gente dejó el cable para ahorrar dinero. El precio fue la fuerza impulsora detrás de la gran migración televisiva, atrayendo a millones de hogares a cambiar sus rígidos contratos de cable por la libertad y asequibilidad del streaming. Pero de cara a 2026, nuestros datos muestran un cambio masivo en la intención de cortar el cordón umbilical. Si bien el precio sigue siendo la razón principal por la que la gente se registra…











